El trasiego ilegal de ganado ha generado pérdidas económicas de hasta 5 mil millones de pesos en México, según reveló Vicente Gómez Cobo, presidente de la Federación Mexicana de Lechería (Femmeleche). Durante la presentación del 10° Foro Internacional de Lechería, que se realizará el 3 de abril en Chihuahua, el empresario hizo un llamado al gobierno federal, encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum, para combatir este delito y proteger a los productores nacionales.
El impacto del trasiego ilegal de ganado en el mercado local
Gómez Cobo destacó que el trasiego ilegal de ganado afecta gravemente a los productores nacionales, ya que cada año ingresan al país aproximadamente 500 mil becerros por la frontera sur. Este flujo masivo de animales inunda el mercado local con precios muy por debajo del valor real, lo que impide que los becerros nacionales encuentren espacio en el mercado.
El presidente de Femmeleche subrayó que México es el mayor importador de leche a nivel mundial y que actualmente el 30% del consumo nacional depende de las importaciones. Sin embargo, aseguró que este panorama podría revertirse en un plazo de cinco años si se implementan políticas públicas adecuadas que fortalezcan al sector.
Necesidad de políticas públicas para fortalecer la producción nacional
Gómez Cobo insistió en que los productores nacionales tienen la capacidad para satisfacer la demanda local, pero requieren un mayor apoyo de las instancias oficiales.
“Es necesario que como país dediquemos políticas públicas y recursos para que esta actividad sea viable”, afirmó.
Advirtió que, de no tomar medidas, para el 2050 la mitad de la demanda de leche en México podría cubrirse con importaciones, un riesgo latente dado que el país es el más abierto a la importación de leche en el mundo.
Entre las medidas urgentes, el directivo mencionó la necesidad de una política monetaria menos restrictiva, que permita a los productores nacionales acceder a préstamos con tasas competitivas. También destacó la importancia de agilizar los procesos del SAT para ejecutar devoluciones de impuestos y mantener el flujo de recursos que sostiene la producción.
Respecto a la posible imposición de aranceles por parte de Estados Unidos, Gómez Cobo explicó que el impacto en el sector lechero sería significativo solo si México aplica una medida espejo, ya que el 70% del precio de los insumos para los productores está dolarizado.
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Aunque la exportación de leche hacia Estados Unidos es mínima y se limita a zonas específicas, una confrontación arancelaria podría afectar la disponibilidad de insumos a buen precio, lo que pondría en riesgo el crecimiento del 2.5% registrado en la producción de leche el año pasado.
En conclusión, el trasiego ilegal de ganado sigue siendo un desafío crítico para el sector agropecuario mexicano, y su solución requiere una acción coordinada entre el gobierno y los productores nacionales para garantizar la viabilidad y competitividad del mercado local.
