La propuesta de reducción a la jornada laboral de 48 a 40 horas a la semana tendría efectos negativos en miles de micro, pequeñas y medianas empresas (MiPymes) en México. Así dijo Ada Irma Cruz, presidenta de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo en Pequeño de la Ciudad de México (Canacope). Alertó que esta medida podría iniciar el cierre de aproximadamente 22,732 negocios en la capital del país.
De las 476,000 unidades económicas que operan en la Ciudad de México, una proporción considerable, en su mayoría MiPymes, enfrenta márgenes limitados. Reducir ocho horas de trabajo a la semana sin un plan de compensación podría afectar la productividad y las ganancias de negocios.
LEE TAMBIÉN: Proyectan derraman de 45 mil mdp para el Día del Padre
MiPymes en riesgo de desaparecer
La Canacope explicó que las MiPymes destinan una parte importante de sus ingresos al pago de nómina. Si se aprueba la reducción jornada laboral sin una redistribución eficaz de tareas o apoyo gubernamental, las empresas podrían enfrentar recortes de personal. Esto llevaría eventualmente a los cierres temporales o parciales.
Muchos de estos negocios operan en sectores que requieren atención constante al público, como tiendas de abarrotes, peluquerías, papelerías o talleres. La reducción de horas laborales podría limitar la capacidad de operación y mermar los ingresos diarios.
Reducción jornada laboral : Llamado a una implementación gradual y con apoyo
Ada Irma Cruz llamó al Congreso de la Unión a implementar la reducción de la jornada laboral de manera gradual, considerando incentivos fiscales y programas de capacitación para las MiPymes.
“Se debe contemplar una estrategia integral que tome en cuenta la realidad del sector productivo y proteja los empleos formales generados por estas empresas”, enfatizó.
Finalmente, la dirigente empresarial pidió a los legisladores abrir un diálogo que permita ajustar la reforma sin comprometer la estabilidad económica de miles de negocios. Enfatizó que, aunque se busca mejorar la calidad de vida de los trabajadores, debe hacerse sin poner en riesgo la fuente de ingresos de millones de familias mexicanas.