La Inteligencia Artificial en turismo
Una visión desde dentro
Por: Eduardo Rivera S.
Como profesional en el ámbito de la tecnología y, más aún, como parte de una compañía que ha apostado por la Inteligencia Artificial (IA) para potenciar el sector turístico, he sido testigo de cómo esta tecnología ha pasado de ser una herramienta futurista a convertirse en una necesidad tangible para las empresas que desean sobresalir en la industria.
A lo largo de los últimos años, he visto cómo la IA ha comenzado a transformar profundamente las experiencias de los viajeros y las estrategias de quienes operan en el turismo, algo que se ha vuelto tendencia luego del reciente informe publicado por el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC) en colaboración con Microsoft, el cual habla de cómo la IA puede revolucionar los estándares de esta industria.
Pero la IA ya había estado abriéndose camino en el sector, lo cual no es una sorpresa para quienes llevamos años inmersos en este campo. Sin embargo, lo verdaderamente relevante del informe es su visión sobre el potencial todavía desaprovechado en turismo, un área donde la adopción de tecnologías de IA se ha dado con mayor lentitud en comparación con otras industrias orientadas al consumidor. Según el WTTC, mientras que otros sectores como el e-commerce o el entretenimiento digital han aprovechado las capacidades predictivas y de personalización de la IA, el turismo apenas comienza a vislumbrar sus posibilidades reales.
Una de las áreas donde definitivamente sí ha hecho la diferencia es en la personalización. Desde mi experiencia, uno de los principales beneficios de aplicar IA en el turismo es la posibilidad de entender al viajero de manera profunda y detallada, casi como si tuviéramos una ventana a sus deseos y necesidades. Esta tecnología permite que los hoteles, las aerolíneas y los operadores turísticos puedan recomendar experiencias adaptadas a cada cliente con una precisión antes impensable. Al analizar grandes volúmenes de datos, nuestros sistemas pueden sugerir desde itinerarios personalizados hasta el tipo de actividades y de servicios más atractivos para cada perfil.
Uno de los ejemplos es este servicio que ofrecemos en Global Media Investment y que consiste en el desarrollo de chatbots inteligentes, diseñados para proporcionar respuestas inmediatas y eficaces a las consultas de los usuarios. Estos asistentes virtuales no solo responden preguntas básicas, sino que son capaces de aprender del comportamiento de los clientes para anticiparse a sus preferencias. Un viajero que consulta frecuentemente sobre destinos de aventura, por ejemplo, recibirá recomendaciones alineadas con esa inclinación, mientras que otro que consulta sobre escapadas de lujo o relax obtendrá sugerencias en ese sentido. Esta capacidad de respuesta personalizada hace que el viajero se sienta comprendido y valorado, algo sumamente apreciado por los usuarios.
La IA, sin embargo, no solo ofrece beneficios en el lado de la experiencia del cliente. Desde el punto de vista operacional, sus algoritmos también son una herramienta crucial para optimizar recursos y mejorar la eficiencia. En mi empresa, hemos desarrollado soluciones que permiten a los proveedores de turismo analizar patrones de demanda y realizar ajustes en tiempo real. Mediante el uso de esta tecnología es posible identificar tendencias emergentes, prever picos de demanda y ajustar las estrategias de precios acorde a estos cambios, asegurando que la empresa esté en una posición de ventaja, incluso frente a fluctuaciones de mercado.
Por ejemplo, en temporada alta, los sistemas de IA pueden anticipar la demanda de habitaciones o vuelos y ajustar los precios para maximizar las reservas sin saturar los recursos disponibles. Del mismo modo, en temporadas bajas, es posible realizar ajustes que mantengan la ocupación, mejorando los márgenes de ganancia y, a la vez, optimizando la experiencia de los viajeros. A nivel macro, estos modelos predictivos pueden incluso aportar información de valor para planificar recursos turísticos a nivel estatal o nacional.
Sin embargo, esta adopción no está exenta de retos; como revela el informe de WTTC y como he experimentado de primera mano, una de las mayores barreras en la aplicación de IA en turismo es la gestión de datos. Para que las soluciones sean realmente efectivas, requieren datos de alta calidad, algo que muchas empresas del sector turístico no siempre tienen a disposición o no gestionan de la manera más eficiente. Además, existe una creciente preocupación por la privacidad de los datos y la seguridad cibernética, temas a los que no podemos ser indiferentes. Hoy más que nunca, es imprescindible que las empresas en turismo establezcan políticas robustas para el manejo y la protección de la información de sus clientes, asegurando que la adopción de IA no comprometa la confianza del viajero.
En este sentido, en Global Media Investment ofrecemos la alternativa de “IA ética”, en la que no solo nos centramos en la eficiencia y personalización, sino también en la seguridad y transparencia. Cada dato es tratado bajo estándares de confidencialidad estrictos, y siempre buscamos educar a nuestros clientes y socios sobre la importancia de estos valores. De cara al futuro, creo que la ética y la sustentabilidad deben ser fundamentales en la IA para turismo, ya que la reputación de una empresa puede verse afectada si los viajeros perciben riesgos en el uso de sus datos.
Mirando hacia adelante, la IA abre posibilidades de crecimiento para las empresas de turismo, una oportunidad que las compañías de tecnología y turismo debemos abordar con visión y responsabilidad. El informe sugiere que en los próximos años, el uso de la IA será cada vez más común en aplicaciones que hoy apenas estamos comenzando a explorar: desde el diseño de destinos más inteligentes hasta la automatización avanzada de procesos logísticos y de servicio al cliente. Por eso, en Global estamos dedicados a explorar todas estas áreas, conscientes de que el futuro del turismo lo determinará la capacidad de adaptación ante las necesidades de los viajeros y la optimización de los recursos.
La colaboración entre los sectores público y privado será crucial para aprovechar estas oportunidades. Como profesionales en IA aplicada al turismo, tenemos la responsabilidad de trabajar junto con gobiernos y líderes de la industria para asegurar que las soluciones tecnológicas no solo mejoren las experiencias de viaje, sino que contribuyan a un crecimiento equilibrado, donde la tecnología y la sustentabilidad caminen de la mano.
Es verdad, la IA representa un antes y un después para el sector turístico y ofrece posibilidades que apenas hemos comenzado a vislumbrar. Como alguien que ha trabajado de cerca con estas tecnologías, puedo afirmar que el cambio es real y la oportunidad, inmensa. Hoy más que nunca, la llave del éxito en turismo radica en una adaptación ágil y en una visión de largo plazo, en la que la tecnología de la Inteligencia Artificial no solo mejore la experiencia del cliente, sino que también impulse un desarrollo turístico responsable y con propósito.