El Congreso de la Unión llevó a cabo la toma de protesta de los cinco integrantes del Comité de Evaluación, encargado de seleccionar a los 2,612 candidatos para ocupar cargos como ministros, magistrados y jueces en la próxima elección. Este evento fue presidido por Gerardo Fernández Noroña, presidente del Senado, y Sergio Gutiérrez Luna, presidente de la Cámara de Diputados, quienes subrayaron la importancia de esta tarea en el contexto actual del sistema judicial mexicano.
Responsabilidad del comité
Durante su intervención, Gutiérrez Luna enfatizó que el Comité tiene una responsabilidad crucial ante el pueblo mexicano.
“En sus manos está la confianza del pueblo para llevar a cabo esta elección”, afirmó.
En su mensaje, destacó la necesidad de seleccionar candidatos con un fuerte sentido social, capaces de transformar las condiciones en la impartición de justicia.
Compromiso con la Legalidad
Los miembros del Comité se comprometieron a actuar con transparencia y legalidad. María Concepción Méndez de Lara expresó que su objetivo es garantizar una justicia que sea pronta, completa e imparcial, priorizando el fondo sobre la forma.
“Actuaremos con escrupulosidad y rendición de cuentas a la sociedad”, aseguró.
Por otra parte, Ana Patricia Briseño destacó que su labor será histórica, ya que sentará un precedente en el proceso de selección judicial. Aseguró que los ciudadanos pueden estar tranquilos, ya que se apegarán a la normatividad para garantizar que los perfiles elegidos sean idóneos para ocupar estos importantes cargos.
Enfoque en la honestidad
María Gabriela Sánchez García hizo hincapié en la importancia de la honestidad y responsabilidad entre los futuros juzgadores. Subrayó que esta integridad abarca no solo evitar actos de corrupción, sino también mantener una lealtad hacia aquellos que buscan justicia, especialmente las personas con menos recursos.
A pesar del compromiso expresado por los integrantes del Comité, senadores del PAN y PRI manifestaron su preocupación sobre la composición del mismo. Argumentaron que parece estar alineado con intereses oficiales y carece de criterios objetivos para evaluar a los futuros jueces y magistrados, lo que podría comprometer la imparcialidad del proceso.
En conclusión, la toma de protesta a los miembros del Comité de Evaluación representa un paso importante hacia la renovación del Poder Judicial en México. Sin embargo, las críticas sobre su imparcialidad indican que aún existen desafíos significativos por enfrentar en este proceso crucial para el país.