José José, conocido como el “Príncipe de la Canción”, fue uno de los cantantes más importantes del mundo hispano. Su carrera, marcada por el éxito y el reconocimiento internacional, lo convirtió en una figura central de la música romántica en los años 70 y 80. Sin embargo, su situación financiera al momento de morir en 2019 distaba mucho de la bonanza que alguna vez disfrutó.
Durante sus años más activos, José José vendió millones de discos. Solo en la década de los 80, álbumes como Mi vida, Reflexiones y Promesas generaron ventas superiores a los 8 millones de copias. Se estima que, a lo largo de su carrera, el cantante obtuvo más de 15 millones de dólares por sus interpretaciones, ya que no fue compositor de sus éxitos.
No obstante, el propio artista reconoció públicamente que había perdido gran parte de su fortuna. El alto costo de vida, problemas de salud y una larga lucha contra el alcoholismo minaron sus recursos. En 2014, admitió que tuvo que vender su casa para cubrir sus gastos médicos, y en 2017, cuando le diagnosticaron cáncer de páncreas, sus finanzas empeoraron.
¿Dejó herencia José José?
A pesar de su fama y fortuna pasada, al morir a los 71 años en Miami, José José no dejó bienes materiales significativos. Sus hijos mayores, José Joel y Marysol, aseguraron que su padre no dejó testamento. También afirmaron que no estaban interesados en disputar ninguna herencia.
Según José Joel, el único ingreso vigente al morir el cantante eran las regalías por sus interpretaciones. Estas regalías, aunque constantes, no eran suficientes para representar una gran herencia. “Mi padre no compuso sus canciones, solo las interpretó, y eso limita mucho el ingreso por derechos”, explicó el hijo mayor del artista.
Además, circularon versiones de que su hija menor, Sara Sosa, habría solicitado a José José firmar documentos en los que le cedía esos derechos. Esta situación generó una fuerte disputa familiar, ya que Sarita fue acusada de haber alejado al cantante de sus otros hijos en sus últimos años.
Tras su muerte, varios medios señalaron que el funeral de José José fue financiado, en gran parte, por sus amigos y por excolaboradores de las disqueras BMG y Sony. La suma necesaria para los servicios funerarios en Miami superó los 100 mil dólares, y fue cubierta por medio de una colecta entre quienes trabajaron con él durante su carrera. Posteriormente, el gobierno de México asumió los gastos del homenaje póstumo en el país.