Marcela Fuente Castillo, titular del Instituto de la Juventud (INJUVE) de la Ciudad de México, inauguró recientemente una ofrenda en el Memorial New’s Divine, donde reafirmó su compromiso con la creación de espacios que fomenten la reconstrucción del tejido social y la memoria histórica entre las juventudes. En su discurso, enfatizó la importancia de prevenir que episodios de violencia y revictimización se repitan en el futuro.
Durante la ceremonia, Fuente Castillo destacó que es esencial concientizar a los jóvenes sobre su historia para garantizar que no sean nuevamente víctimas de violencia.
“Debemos trabajar juntos para que los jóvenes nunca más sean revictimizados ni criminalizados”, afirmó.
La funcionaria subrayó que el derecho a la no repetición de estos hechos es fundamental para construir un futuro más justo.
Colaboración con familias de víctimas
La titular del INJUVE también expresó su disposición para colaborar estrechamente con los familiares de las víctimas del New’s Divine.
“Estamos aquí para abrir nuevas posibilidades y construir un entorno donde las juventudes puedan expresarse libremente”, añadió.
Enfatizando la necesidad de diálogo y cooperación entre el gobierno y las familias afectadas.
Actividades en el memorial
La inauguración de la ofrenda se enmarca dentro de una serie de actividades organizadas para conmemorar el Día de Muertos. Entre ellas se incluyen una rodada ciclista, rifas, presentaciones musicales del Mariachi INJUVE, así como espectáculos de danza. También se proyectó el documental “New’s Divine. Nunca Más”, que busca reflexionar sobre los eventos trágicos ocurridos en este emblemático lugar.
Además, la ofrenda estará abierta al público desde el 30 de octubre hasta el 6 de noviembre, permitiendo a los visitantes rendir homenaje a las víctimas y participar en actividades que promueven la memoria colectiva y el respeto por los derechos humanos.
Compromiso con un futuro Mmejor
Marcela Fuente Castillo concluyó su intervención reiterando el compromiso del INJUVE para trabajar en pro de las juventudes, creando espacios seguros donde puedan imaginar un futuro sin violencia. Este esfuerzo busca no solo recordar a quienes han sufrido, sino también empoderar a las nuevas generaciones para que se conviertan en agentes de cambio en sus comunidades.
Por lo que, a través de iniciativas como esta, se espera fortalecer el tejido social y garantizar que las lecciones del pasado no se olviden, promoviendo un entorno más inclusivo y equitativo para todos.