La violencia política escaló a niveles alarmantes en Minnesota con el asesinato de Melissa Hortman, ex presidenta de la Cámara de Representantes estatal, y su esposo, en un ataque coordinado contra dos hogares de legisladores demócratas. El agresor, vestido con un uniforme falso de policía, también dejó gravemente herido al senador John Hoffman y a su esposa.
Los ataques ocurrieron en las ciudades de Champlin y Brooklyn Park, a 13 km de distancia, durante la madrugada del sábado. El gobernador Tim Walz confirmó que fue un “asesinato político” y activó el Centro de Operaciones de Emergencia del estado. Hortman, una figura clave en el Congreso local, y Hoffman, reconocido por su trabajo en comités de salud, fueron emboscados en sus casas con un modus operandi similar, según investigaciones preliminares.
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El FBI se unió a la búsqueda del sospechoso, descrito como “un cobarde disfrazado de protector” por la Asociación de Sheriffs de Minnesota. Aunque no se ha revelado su identidad, las autoridades analizan grabaciones de seguridad y testimonios para determinar si el ataque tuvo motivaciones ideológicas. Este crimen ocurre en un contexto nacional donde los incidentes violentos contra funcionarios han aumentado un 300% desde 2020, según el Congressional Threat Assessment Center.
