Al interior del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) reportan un escenario de división derivado de diferencias con Francisco Cervantes. De acuerdo con versiones empresariales, se planteó la posibilidad de su salida antes de que concluya el año.
El malestar aumentó tras la salida de Jorge Alberto Juraidini, que se interpretó como un indicio de rompimiento interno. Reportes al interior del organismo cúpula del sector empresarial señalan que la relación entre la presidencia y diversos sectores empresariales se deteriora con velocidad.
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Las versiones arrojan varios casos que ponen bajo la lupa a Francisco Cervantes, quien buscaría establecer una nueva instancia paralela al CCE para concentrar negociaciones con el gobierno federal.
Dicha iniciativa genera preocupación entre miembros del sector privado, quienes advierten que podría agravar la fragmentación del organismo. Sobre todo luego de los señalamientos de ver por sus intereses personales.
Fuentes señalan que hay familiares directos del presidente del Consejo laborando en las oficinas, lo cual generó cuestionamientos entre integrantes del organismo. Asimismo, se reportó la realización de eventos sociales en Tlaxcala con recursos del consejo.
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Diversos sectores, incluidos representantes de pequeñas y medianas empresas, han señalado una falta de atención a sus demandas. También se acusó la reciente solicitud de adquisición de un vehículo nuevo para uso del presidente del organismo.
El CCE ni Francisco Cervantes han emitido una postura oficial sobre estos señalamientos. Mientras tanto las diferencias internas continúan en espera de una resolución o reconfiguración en su estructura de liderazgo.
Por Celeste Ortega
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